13/04/10

LA SEGUNDA EN FORMA DE ACCIDENTE


Probablemente, la sentencia más repetida de Carlos Marx, junto a "Proletarios de todos los países: uníos" sea la corrección que hace en "El 18 Brumario de Luis Napoleón Bonaparte" a una observación de Hegel:

Hegel dice en alguna parte que todos los grandes hechos y personajes de la historia universal aparecen, como si dijéramos, dos veces. Pero se olvidó de agregar: una vez como tragedia y la otra como farsa”.

El accidente aéreo en el que perdió la vida el presidente polaco y una parte importante de su Gobierno, nos permitiría reformular la expresión de Marx para Polonia: la tragedia que se lleva de cuando en cuando a sus elites se ha repetido dos veces: la primera como crimen, la segunda, como accidente. El avión Tupolev que se estrelló en los alrededores de la ciudad rusa de Smolensk llevaba a sus pasajeros a la celebración de un acto en recuerdo de las matanzas de Katyn, que en este mes cumplen 70 años.

El 4 de abril de 1940 tuvo lugar la primera saca: casi 400 personas fueron llevadas al bosque de Katyn, próximo a la ciudad ya citada de Smolensk y fueron asesinados por la Unión Soviética a tiros een la nuca. Eran oficiales del ejército polaco en su mayoría, pero también había profesores universitarios y profesionales. Las excursiones al bosque se repitieron durante toda la primavera de 1940 hasta totalizar un número no inferior a 15.000 asesinatos. La Wehrmacht descubrió las tumbas y las denunció. Stalin hizo creer al mundo que era propaganda nazi, que había sido la Gestapo. Yo mismo creí esta versión hasta que la política de 'glasnost' (transparencia) de Gorbachov, le llevó a desclasificar los documentos que acreditaban la autoría soviética de las matanzas.

Todo parece bastante simple: Molotov y Von Ribbentrop firmaron el pacto germano-soviético en nombre de Stalin y Hitler el 23 de agosto de 1939.* Bajo la fórmula de la no agresión había un pacto tácito para repartirse Polonia, Auschwitz y Katyn. Era exactamente lo que necesitaba Hitler para empezar la guerra: invadió Polonia ocho días más tarde.

Qué gran asunto para una reflexión de Cayo Lara, este intelectual alternativo que pastorea Izquierda Unida si sus dotes le permitiesen el esfuerzo. El cineasta Andrej Wajda, hijo de uno de aquellos oficiales asesinados, ha rendido un homenaje a la memoria de su padre. Ya octogenario, realizó hace tres años una película hermosa, pura, terrible, en la que describe la tragedia. 'Katyn' tardó dos años en estrenarse en los cines españoles. Este aniversario sería una magnífica ocasión para que TVE la emitiera.

En un momento dado de la película, uno de sus personajes enuncia con simplicidad las consecuencias del crimen para un país sin dirigentes: 'Polonia nunca será una nación". Entre el crimen de hace 70 años y el accidente de ayer, Polonia es un país cuyo destino histórico parece llevarla a la definición que hacía Alfred Jarry en Ubu, Rey: Los hechos sucedieron en Polonia, es decir, en ninguna parte.


SANTIAGO GONZÁLEZ

Sem comentários:

Enviar um comentário